Cuando se trata del temor del hombre hacia la muerte, a lo largo del tiempo distintas personas han perseguido la grandeza para alcanzar en cierta forma la tan anhelada “inmortalidad”. No obstante, también han existido personalidades las cuales actualmente son recordadas, irónicamente, por lo inusual o extraño de sus muertes. Por eso, te traemos un post sobre muertes insólitas: 6 personajes de la historia.
De que habla este articulo:
6 personajes de la historia cuyas muertes fueron insólitas
A continuación te daremos a conocer la vida y obra de 6 personajes que han hecho historia pero, que al mismo tiempo, tuvieron un final tanto abrupto como desconcertante:
Muertes insólitas – El Papa Adriano IV:
Ha sido el único papa de origen inglés en la historia. Tras largo tiempo de su vida dedicada a los estudios, este fue ascendiendo hasta alcanzar importantes cargos dentro de la Iglesia Católica, hasta que finalmente fue elegido por unanimidad como nuevo papa después de la muerte del Papa Anastasio IV.
Fue consagrado el 18 de junio de 1155 y llamándose desde entonces Adriano IV. Durante su gestión como papa, este defendió la supremacía papal defendiéndose ante otros gobernantes. También hizo vida en el tema de la política tomando parte en varias alianzas. Toda esta carrera de actividades terminó en el año 1159.
Al parecer el 1 de septiembre de ese año, el Papa se encontraba en la ciudad de Anagni en Italia cuando venía de vuelta a su palacio tras haber realizado un largo sermón contra el emperador Federico I, a quien habría amenazado con excomulgar.
Mientras se movilizaba, se detuvo para tomar agua en la fuente del pueblo, y fue cuando sorpresivamente una mosca entro en su boca y se quedó atorada allí ocasionándole asfixia. Lamentablemente los médicos no pudieron hacer mucho por él y falleció.
Muertes insólitas – Hans Steininger:
La moda de las barbas largas ha vuelto y esta se ha extendido por todo el mundo, y al parecer, es inofensiva. Pero no es la única vez en la historia en las que algunos hombres lucen de forma orgullosa sus prominentes y voluminosas barbas.
En el siglo VI, cerca de Braunau am Inn, este hombre se había convertido en el alcalde de una ciudad fronteriza entre Austria y Alemania. Sin embargo, su fama no ha transcendido por su rol como líder, sino más bien por aquella larga barba que media cerca de 1,40 m. Aun así, algo que sí superó la exuberancia de su barba fue la manera como murió, para luego quedar gravada como una de las muertes más inusuales de la historia.
El 28 de noviembre de 1567 hubo un incendio que causó pánico en la ciudad. Steininger, quien tenía como de costumbre enrollar su barba en el bolsillo, esta vez, debido al desesperación y conmoción por el incendio, corrió con su barba colgada.
En medio de aquel caos y la desesperación, el hombre pisó su propia barba y se enredó cayendo por una escalera donde se rompió el cuello. De cierta manera, se puede decir que su muerte fue a causa de su propia barba. Lo curioso es que esta barba ha sobrevivido hasta nuestros días, ya que es conservada en exhibición en un museo local 450 años después de la muerte del Alcalde, convirtiéndose así en una importante reliquia.
Muertes insólitas – Adolfo Federico de Suecia:
Fue un rey sueco que vivió en el siglo XVIII, el cual gobernó por 20 años y como monarca fue catalogado como uno de los más débiles de la historia de Suecia, estando siempre sometido a las atenciones de los partidos políticos y su mandato dentro de la historia de Suecia no tuvo mayor importancia.
En varios intentos de fortalecer su poder en 1771, a la edad de 60 años, murió el 12 de febrero de ese año un día de celebración importante lo que era tradicional. En un gran banquete sin límites, este monarca de bajo perfil comenzó por comer langostas, tomar champan en cantidades exageradas y después de aquella cena tomo el postre pero no satisfecho con uno, se sirvió 14 porciones. Un festín que causo una indigestión severa y lo llevo hasta la muerte.
Muertes insólitas – Arnold Bennett:
Un exitoso novelista, dramaturgo ensayista y periodista que nació en 1867, en Hanley, Inglaterra. Como excelente hombre de letras, mantuvo siempre una actitud competitiva con su carrera desde muy joven al hacer publicaciones en revista populares, siendo editor y redactor.
En 1900 abandonó la actividad periodística y de dedico a la literatura que lo apasionaba aún más ya que tenía muchos éxitos. Era un hombre astuto y listo pues llego a tener una posición que lo hacía privilegiado ante otros profesionales. Escribió 30 novelas y piezas teatrales.
Según se dice que en 1931, en París las personas de aquella ciudad creían que el agua estaba contaminada, y Bennett, haciendo alarde de la superioridad y arrogancia que lo caracterizaba, decidió beber el agua del grifo de un restaurant. Para demostrar públicamente que todos estaban equivocados, y que él tenía la razón, al tomar aquella agua para demostrar que estaban en buenas condiciones a los pocos días falleció de fiebre tifoidea.
Muertes insólitas – Francois Vatel:
En 1631 en Francia, podemos encontrarnos con este hombre quien fue un excelente cocinero y organizador de eventos y banquetes. A este virtuoso personaje se le atribuyo haber creado la crema chantillí en el castillo del mismo nombre mientras le prestaba sus servicios a Luis II.
Trabajó en la cocina del palacio Vaux-le-Vicomte, a la temprana edad de 23 años. Para celebrar la inauguración de este palacio preparo un gran banquete para Luis XIV, donde también estaba Ana de Austria y toda la corte. Se ideó una espléndida fiesta donde destacaron 80 platos, 30 mesas de Bufete, acompañamiento musical y todo lo que se requería para lograr los más altos estándares de los que se estaba acostumbrado a tener en sus eventos.
En 1671 Luis II, al estar en una fuerte situación económica y al borde de la ruina y al haber participado en una rebelión contra Luis XIV de Francia, decidió invitar al rey y toda su corte para hacer las paces y agradar al rey. Esta gran celebración que duraría 3 días y 3 noches debía ser organizada y del éxito que tuviera esta recuperaría los favores del rey. Así que Vatel, como era su estilo, comenzó a organizar la más fantástica fiesta 15 días antes.
Por supuesto, perfeccionista como era siempre, cuidaba hasta los más míninos detalles, pero en esta ocasión las cosas no salieron tan perfectas como el esperaba. Pues la tardanza del pescado lo puso al límite, no soporto la presión y se quitó la vida atravesándose una espada. Según se dice, el cuerpo de Vatel fue encontrado por el ayudante que fue a avisarle que el pescado ya había llegado.
Muertes insólitas – Thomas Urquhart:
Este escritor y traductor escoses, quien también pertenecía a la nobleza escocesa, contó con una gran educación que lo hizo destacar en su carrera, y muy activo en la política, tomando parte en el bando monárquico. Llego a ser considerado un traidor por el parlamento. A tal punto que terminó como prisionero después de luchar junto a Carlos II de Inglaterra en una batalla donde las tropas de la monarquía fue derrotada.
Entre la vida política, sus escritos de viajes y exilios, este hombre tuvo una muerte más que anecdótica. Fue muy desafortunada en el sentido de que nadie desearía haber escrito en su obituario. Según la historia, este hombre falleció en 1660 cuando se enteró que Carlos II con quien había luchado en el pasado había sido destituido en el trono y también la monarquía Británica.
Al final, esta noticia le cayó tan bien que comenzó a reír descontroladamente, teniendo un ataque de risa que al perecer le produjo la muerte. Esa historia fue aceptada por sus contemporáneos como creíble, ya que este hombre tenía fama de bromista y excéntrico.